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EXPOSICION "LA TABERNA DE AZUELO"

Cuando llega el verano la Asociación Santa Engracia de Azuelo monta una exposición etnográfica recordando la vida de antaño del pueblo. Este año el…
30 Julio, 2015

Cuando llega el verano la Asociación Santa Engracia de Azuelo monta una exposición etnográfica recordando la vida de antaño del pueblo. Este año el tema elegido ha sido “La Taberna de Azuelo”.

El día 25 de julio con motivo de la celebración del “Día de Nuestros Mayores” en Azuelo se abrió al público en la Casa de la Conrada, “La Casa Encantada de Azuelo”, la exposición etnográfica “La Taberna de Azuelo” que se podrá visitar hasta el 31 de agosto con el siguiente horario: Laborables de 17´00 h. a 19´00 h. y sábados y festivos de 12´00 h. a 14´00 h. y de 17´00 h. a 19´00 h.

La exposición se ha estructurado en tres estancias, las mismas con las que contaba la taberna de antaño, el mostrador, la cocina y la sala.

El mostrador o barra estaba localizado en la planta baja y se utilizaba para el despacho de bebidas, bien en vasos, bien en botellas cuando la permanencia de los clientes en la taberna iba a ser corta. La cocina que se utilizaba mayormente en invierno por el calor y lo acogedora que era, en las demás estaciones hasta que venía la cuadrilla y se pasaba a la sala, aquí la permanencia de los clientes era más larga que en el mostrador. La sala que se utilizaba para permanencias prolongadas, cuando se echaba la partida o se hacía merienda-cena, a veces eran tan prolongadas las permanencias que terminaban al amanecer, sobre todo en invierno cuando las labores del campo no se podían hacer por las inclemencias del campo.

La taberna era el centro social por excelencia de los hombres, las mujeres la tenían vedada, excepto la tabernera que era el alma y la jefa de la taberna. Otros centros de socialización masculina en los pueblos rurales eran el molino, la fragua, la herrería, la carpintería mientras las mujeres se decantaban por el lavadero que era paritario a la taberna en todos los aspectos, por supuesto que los hombres no tenían cabida allí, el horno del pan, la carnicería o las tiendas.

La exposición montada en Azuelo tiene un plus añadido, veámoslo. La última taberna se cerró en Azuelo el año 1975, año en que sus dueños Mari y Pedro emigraron a Bilbao. Fue este mismo año cuando la necesidad de tener un local de referencia para la socialización del pueblo hizo que se crease nuestra Asociación, la Asociación Cultural Recreativa Santa Engracia, que tanta vida en todos los campos está dando a nuestro pueblo. Pero cuál es el valor añadido. Pues… que en esta exposición se pueden ver el mostrador con su vajilla original, vasos y tazas, las mesas, las sillas y la estufa de la sala de la última taberna de Azuelo, la cocina económica, la fregadera, el escurreplatos, la mesa camilla y el brasero de la cocina, hasta quedan botellas y licores de aquella época. ¡Quién no se acuerda de tomarse una “vaca verde”, leche caliente o fría, según estaciones, con pipermín! O berberse una copa de aquel coñag que ¡Está como nunca, está como nunca, Fudador! O de aquel otro ¡El de la maya dorada, campeón de la temporada, Terry,Terry…! O aquel otro ¡Expléndido Garbey!  Ahora que está prohibido fumar en los bares, ¿te gustaría prenderte un Celtas Corto, un Jeans, un Bisonte o un Camel o un Chester?

Una colección de fotografías en blanco y negro ilustran la exposición y hacen recordar aquellos tiempos de meriendas, rondas de mozos a americanos o desposados, fiesta de Santa Agueda… Aquellas veladas alrededor de un tocadiscos o la incipiente televisión.

Una exposición que te trasladará cuarenta años atrás en el túnel del tiempo. Los mismos años que los restos de la última taberna de Azuelo, la de Mari y Pedro, han estado durmiendo la nostalgia de sus dueños en un rincón de un pajar. No son muchos años, es casi medio siglo, con un ritmo de evolución que como diríamos con la sensación térmica parece que han sido muchos más años.

Una pregunta. ¿Cuántos años van a tener que pasar los fondos etnográficos de Navarra castigados a estar en cajas en una nave de Merkatondoa de Estella hasta que tengan museo donde ser expuestos? ¡Estos políticos, que no valoran su pasado! ¡Para amar y conocer un pueblo, hay que conocer su pasado!. En Azuelo hacemos lo que podemos, que no es poco.

¡Ah! Si vienes a ver “La Taberna de Azuelo”, la lozana tabernera que ahora la regenta te invitará a un vaso de vino o a un mosto. ¡Que lo sepas!