DIA DE LA MUJER DE AZUELO 2017

28 Marzo, 2017

El día 25 de marzo se celebró en nuestro pueblo el “Día de la Mujer de Azuelo”. La celebración de esta jornada se ha asentado desde sus orígenes en el último sábado de marzo. La Asociación Santa Engracia convoca a esta actividad a todas sus socias, tanto a las que viven en el pueblo como a las que viven fuera. Este año fueron treinta y dos las mujeres que acudieron a la cita cerrando con esta jornada las actividades que se programan en la Zona de Los Arcos para conmemorar el “Día de la Mujer Trabajadora”.

Una programación muy completa acompañada de una suave capa de nieve vespertina ocupó toda la jornada. Eran las once y media cuando el bandeo de campanas anunciaba que en Azuelo era un día de fiesta grande. El tañido de las campanas era la señal del inicio de las actividades y llamaba a quien quisiera asistir a la eucaristía que tendría lugar a las doce horas en el Monasterio Benedictino de San Jorge. Tas la misa, las mujeres se trasladaron a la Casa de la Conrada, la “Casa Encantada de Azuelo” y en su salón tuvo lugar el acto cultural, una conferencia a cargo de Alejandra Arévalo bajo el epígrafe, “LAS MUJERES, DEPOSITARIAS DEL SABER DE LAS PLANTAS”. Terminada la conferencia las mujeres se trasladaron al Santuario de Codés, a muy corta distancia de Azuelo, y en su Hospedería asistieron a una comida de hermandad. En la sobremesa tuvieron un bingo con regalos que hubieron de suspender para regresar a Azuelo, ya que la nieve empezó a cubrir el Santuario con su manto blanco generando una bella estampa y una peligrosa carretera para el regreso; alguno de los coches se fueron a la cuneta y se tuvo que hacer uso del quitanieves de Torralba del Río. De regreso a Azuelo continuaron el bingo en el domicilio de la Asociación mientras la nieve iba cubriendo las calles del pueblo. Una nieve que ha llegado muy tarde; nieve muy deseada y necesitada para el campo.

Es Alejandra una riojana afincada en Bargota donde colabora en la Semana de la Brujería instalando todos los años en el portal de su casa una botica de hace siglos tan bien ambientada que parece real. Aficionada y entusiasta del conocimiento de las plantas transmite lo que observa en la naturaleza durante sus paseos bargotanos y lo que bebe en lecturas de libros y documentos tanto modernos como antiguos, porque su profesión, restauradora de libros y documentos, se lo permite.

La Casa de la Conrada, ambientada con la cocina de una herbolaria repleta de todo tipo de plantas silvestres de la zona, y la puesta en escena de Alejandra con su traje de herboristera que viste en la Brujería, hicieron que las asistentes a la conferencia no perdiesen ni una de las palabras de Alejandra. En la cocina no faltó el puñado de “Te de la Peña”, la planta medicinal que más se ha consumido en Azuelo y un recuerdo homenaje a “Benino”, el pastor de las cabras, que era quien abastecía de ella a todo el pueblo.

Hizo Alejandra un recorrido desde los tiempos más remotos a los actuales resaltando la importancia que las plantas han tenido y tienen como remedio de la mayoría de las enfermedades del ser humano y como a lo lago de la Historia ha sido la mujer más que el hombre quien se ha ocupado de conocer y usar las plantas para sanar enfermedades. Remedios que la naturaleza ha puesto al alcance del hombre y que es éste quien tiene que saber buscarlos y administrarlos para mantener su salud. Recalcó bien que las sustancias naturales no son siempre apropiadas para todas las situaciones, ni para todas las enfermedades, ni para todas las personas, y que no deben ingerirse sin orden ni concierto ya que las hierbas medicinales tienen principios activos que a veces son muy peligrosas y hasta pueden acarrear la muerte.

En su recorrido por la Historia,  Alejandra incidió en que desde los primeros tiempos de la humanidad, las plantas nos han sido muy útiles y han estado presentes en casi todas las actividades y necesidades: Como alimento, como medicina, para la fabricación de útiles (cestería, cuerdas, etc), como elemento textil, como componente mágico-religioso o espiritual. Siendo la mujer quien atesora desde la Prehistoria, nómada o sedentaria, el conocimiento de las plantas debiéndose a ella el ancestral huerto donde se cultivaron a partir de plantas salvajes todas las verduras y hortalizas, legumbres y tubérculos que hoy conocemos y comemos.

Desgranó una extensa relación de plantas medicinales que se usan como remedio de males y dolencias que aquejan nuestra salud. Al finalizar la conferencia la Asociación ofreció la degustación de una infusión de santolina y una caja de crema para la piel a cada una de las asistentes.

Así transcurrió esta jornada de convivencia  de las mujeres de Azuelo en la que la reducida población de la localidad no es óbice para realizar esta actividad que sorprende a propios y extraños tanto por su contenido como por el sano ambiente que se genera entre las mujeres asistentes.